La Coalición reclama una actuación urgente por parte de la Conselleria de Medio Ambiente al tratarse de productos tóxicos que se están poniendo al descubierto y mezclando con otros residuos urbanos sin control.
En el vertedero de Alpuente hay enterradas miles de toneladas de harinas cárnicas de origen animal en forma de pienso, las cuales fueron selladas tras la prohibición de su consumo por la Generalitat a raíz de la crisis del mal de la vacas. Unas 10 mil toneladas de producto tóxico según han cifrado los ecologistas.
Según el portavoz comarcal de Compromís en la Serrania, Paco Garcia Latorre, este depósito de harinas cárnicas, que en un principio era provisional, se ha convertido en “definitivamente provisional.” Dicho vertedero tiene graves problemas de gestión y de seguridad, ya que desde su puesta en funcionamiento se han denunciado fugas de lixiviados debido a la perforación de la membrana impermeabilizante.
Compromís se ha hecho eco de una reciente denuncia de Ecologistas en Acción de la Serranía, que ha puesto de manifiesto que la concesionaria que gestiona este vertedero parece que está alterando el sellado de las harinas cárnicas y utilizando este material para tapar las basuras que allí se vierten, poniendo sobre los residuos urbanos un material tóxico con gran riesgo de contaminación.
Así como que, contando con licencia exclusiva para Residuos Sólidos Urbanos (RSU) de los pueblos de Alpuente, Aras, La Yesa y Titaguas, al parecer también está siendo utilizado para verter las basuras de las poblaciones del Rincón de Ademuz.
Igualmente, el vallado del vertedero presenta varios agujeros por los que se puede acceder al vaso de las harinas, hecho que atenta directamente contra la seguridad de la sanidad animal y alimentaría, haciendo dejadez en cuanto a una gestión responsable y de acuerdo a la licencia concedida en su momento.
Es por ello, por lo que el Diputado de Compromís en Las Cortes, Juan Ponce, ha alertado la Conselleria sobre estas presuntas prácticas y ha reclamado acciones urgentes para paralizar lo que podría ser un desprecinto ilegal de un vertedero de productos tóxicos (como lo son las harinas cárnicas), así como la saturación de vertidos, con la extra limitación en el número de localidades a las que ha de dar cobertura este vertedero de Alpuente.
Ponce reclama a la Conselleria que se cumpla y haga cumplir la normativa de vertidos y que verifique a través de los medios de que dispone si estos hechos pudiesen ser constitutivos de una infracción administrativa o penal y que actúe en consecuencia, con el fin de prevenir nuevas contaminaciones ambientales.