Después de que la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) haya otorgado hoy al Aeropuerto de Castellón su certificación, la portavoz adjunta del grupo parlamentario Compromís, Mónica Oltra, ha señalado que “el caso de este aeropuerto es un ejemplo de cómo no se debe gobernar. Este fue un proyecto personal del delincuente Carlos Fabra, que está en prisión por defraudar a la Hacienda Pública, pero que el daño que le ha hecho a los ciudadanos es mucho mayor que ese fraude fiscal”.
“Carlos Fabra se empeñó en hacer este aeropuerto simplemente para ganar votos, sabiendo que esa infraestructura es inviable. Nos ha costado unos 200 millones de euros entre la construcción, las obras anexas, las indemnizaciones y la adjudicación a la empresa que ahora lo gestionará, un dinero que ahora necesitaríamos para hacer políticas sociales, de educación, sanidad o justicia etc… y no tenemos”.
Para Oltra “es muy cuestionable la viabilidad de este aeropuerto y también es muy cuestionable que no vaya a seguir costando más dinero a las arcas públicas porque después haya que pagar a compañías aéreas para que aterricen en Castellón. Debemos recordar que la Generalitat ya tiene un historial de otorgar ayudas en forma de promoción publicitaria a compañías aéreas como Ryanair. En cualquier caso ha sido una manera de despilfarrar y malversar, en el sentido político de la palabra, el dinero de los ciudadanos, que habría sido mejor invertido en otro tipo de infraestructuras”.
“Desde Compromís vamos a estar muy alerta porque no vamos a tolerar que se gaste ni un euro de dinero público en pagar más, ahora para que vengan aviones. Así que veremos si ahora se para la sangría que ha supuesto el aeropuerto o todavía hay cláusulas confidenciales, que se esconden a la opinión pública, que encarecen el coste de esta infraestructura”, ha concluido la parlamentaria de Compromís.