El secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro, ha representado durante toda esta semana a la Generalitat en la cumbre del clima COP22 que se ha celebrado en la ciudad de Marrakech. Álvaro hace un balance un tanto agridulce del encuentro. “Resulta evidente, después de estos días de negociaciones, que estamos ante un impasse en la política internacional contra el calentamiento global del planeta. Se avanza muy lentamente y la sombra de Trump es alargada, lo que hace más difícil, si cabe, concretar medidas y sus correspondientes calendarios para llevarlas a cabo. Aún así, todo parece indicar que estamos en una especie de transición que finalizará en 2018, año en el que el Grupo Interdepartamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) deberá emitir el informe especial 1.5º”, ha destacado Álvaro.
“Si la situación internacional es poco halagüeña, la actitud del Gobierno de España es muy preocupante, por no decir sencillamente indolente”, ha señalado el secretario autonómico. “El Gobierno Rajoy ha hablado en Marrakech sobre una nueva Ley de Cambio Climático en España al tiempo que reconocía no haber escrito ni una sola letra de esa norma. Desde la Generalitat tenemos claro que podemos ser la ‘locomotora’ de nuestro país en la lucha contra el Cambio Climático, porque seremos las autonomías y las ciudades los que, al final, implementaremos la mayoría de las medidas que sean necesarias”, ha afirmado Julià Álvaro.
Para el secretario autonómico de Medio Ambiente, una buena muestra de ese liderazgo tiene que ver con uno de los temas al que se le ha prestado mayor atención en la COP22 de Marrakech: la situación de nuestros mares y océanos. Se hace urgente actuar para detener la contaminación marina, porque anualmente se vierten a nuestros mares más de 7 millones de toneladas de residuos, y la mitad son envases de plástico.
Según Julià Álvaro, “la preocupación que se ha puesto de manifiesto estos días en Marrakech respecto a los océanos refuerza, sin duda alguna, una de las medidas mas ambiciosas que impulsa la Generalitat Valenciana: el nuevo sistema de gestión de envases, el SDDR. Se trata de una medida de economía circular, otra de las apuestas claves de esta cumbre, que nos permitirá llegar al 90% del reciclaje de envases en la Comunitat Valenciana, cuando en la actualidad sólo alcanzamos un lamentable 30%”.
“A estas alturas no podemos caer en la trampa, como otros, de la inacción o la inactividad -ha asegurado el secretario autonómico de Medio Ambiente-, sino que debemos seguir la senda abierta en la COP21 de París, y adoptar medidas y decisiones políticas encaminadas a reducir el impacto que provocamos en el clima. Ese es el compromiso de la Generalitat, le pese a quien le pese”.