Las diputadas de Compromís, Isaura Navarro y Marian Campello, han pedido explicaciones a la Universidad Católica de Valencia (UCV) por haber invitado al ex presidente de Colombia, Álvaro Uribe, a dar hoy una conferencia en sus instalaciones.
Para Navarro “no tiene ningún sentido que la UCV ligue su imagen a un personaje que no tiene nada que ver con los valores del cristianismo como es Álvaro Uribe Vélez. Se ve que hay que recordar que Uribe está haciendo campaña por la guerra en Colombia, por la continuación del conflicto armado y en contra del proceso de paz”.
“Uribe simboliza el vínculo con el narcotráfico y el paramilitarismo, un personaje que durante su mandato engañó a la comunidad internacional diciendo que estaba haciendo un proceso de desmovilización del paramilitarismo, que todo el mundo, incluyendo los paramilitares, dijeron que era una farsa. El paramilitarismo continúa activo completamente, persiguiendo y asesinando a los defensores y defensoras de los derechos humanos en Colombia. Uribe nunca ha estado por la paz, siempre por el conflicto, por la guerra”
Durante su primer viaje a Colombia en 2004, Isaura Navarro, siendo diputada en el Congreso, fue espiada por los servicios secretos bajo las órdenes de Álvaro Uribe. Navarro acudió como invitada a unas jornadas en defensa de los derechos humanos y, como fue desvelado posteriormente gracias a un informe de la Fiscalía colombiana sobre las ilegalidades de los servicios secretos durante el mandato de Uribe, fue una de las activistas a las que se les realizó seguimientos e interceptación de comunicaciones para tratar de desprestigiar su trabajo en favor de las víctimas de la violencia en Colombia.
Por su parte, Marian Campello ha señalado que “Álvaro Uribe tiene muchas cosas que contar, pero no en una conferencia en una universidad valenciana, sino ante un tribunal de justicia, lo que hasta ahora no ha ocurrido por la gran impunidad que existe en Colombia”.
“En vez de una conferencia de Uribe, la UCV ayudaría más al pueblo colombiano si organizara conferencias sobre el proceso de paz firmado y los enormes obstáculos para ponerlo realmente en práctica, básicamente por los incumplimientos gubernamentales. Y si desde esta universidad todavía quieren ir más allá en su ayuda podrían implicarse sobre el terreno en la verificación del cumplimiento de los derechos humanos en Colombia. Está demostrado que mientras comisiones internacionales comprueban in situ la aplicación de los acuerdos de paz, los asesinatos de defensores de los derechos humanos colombianos descienden enormemente”, ha concluido Campello.