La portavoz adjunta de Compromís en las Corts Valencianes, Mònica Álvaro, a raíz de la información conocida hoy sobre el caso de corrupción que salpica al senador valenciano del PP, Pedro Agramunt, ha manifestado que “Isabel Bonig ya no tiene ninguna excusa para mantenerlo en el cargo. Desde Compromís ya conseguimos la dimisión de Agramunt como presidente de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE), pero a todas luces resulta insuficiente, dada la magnitud del informe de la PACE, y tiene que dimitir también del cargo de senador del cual también podría haberse aprovechado. Su dimisión tiene que ser ya por higiene democrática”.
Según Álvaro, el fundador del PPCV y ex presidente del partido, Pedro Agramunt Font de Mora, “ya salió indemne del caso Naseiro al cerrarse por considerar que las escuchas telefónicas estaban fuera de lugar, pero las costumbres lobbistas del actual senador no han variado a tenor de lo que se publica hoy, fruto de un informe sobre corrupción en el Consejo de Europa y que se debate esta semana en sesión plenaria”.
“Desde Compromís venimos advirtiendo en el último año del peligro que ocasionaba mantener en un lugar de representación de los valencianos y valencianas a Agramunt, dado que hizo valer su condición de senador valenciano para viajar hasta Siria y mantener entrevistas con el propio dictador Bacher Al Asad. Entonces ya tenía que haber dejado cualquier cargo de representación”, ha declarado la portavoz de la Comisión de Asuntos Europeos en las Corts, Mònica Álvaro, quien también ha añadido que “no obstante esperó a que el Partido Popular Europeo le retirara su confianza para dimitir del cargo en Europa, pero no así del cargo de senador, en calidad del cual había efectuado el viaje acompañado de parlamentarios rusos”.
“Es muy grave que nuevamente el nombre de València esté salpicado de corrupción, prostitutas, regalos de Hermes e incluso caviar. Y Bonig, como presidenta del PPCV, ha de exigir inmediatamente la dimisión de Agramunt, quien además cuenta con antecedentes por el caso Naseiro y otros casos de corrupción más actuales, como por ejemplo Imelsa, además de quedar en entredicho los informes que hacía para la ‘diplomacia del caviar’, donde con técnicas presuntamente corruptas habría tratado de esconder las prácticas hostiles de esta ex república soviética en cuanto a los derechos humanos de su ciudadanía”, ha explicado la diputada.
“Agramunt tiene que dimitir, sin más dilación, del cargo de senador, y el silencio de Bonig y su equipo al respecto los hace cómplices de esta trama corrupta que ahora ve la luz. Se demuestra con el informe de la PACE que el PP valenciano ya era corrupto desde su fundación en 1999, cuando Agramunt ostentaba el cargo de primer presidente del PPCV”, ha concluido Mònica Álvaro.