La diputada y portavoz de Compromís en la Comisión de Medio Ambiente, Agua y Ordenación del Territorio, Graciela Ferrer, quien ha participado esta mañana en la concentración de protesta en Manuel para exigir medidas que revivan el río Albaida, ha señalado que “año tras año vemos cómo se seca el río, como no se garantizan los caudales ecológicos, y cómo continúa la mortandad de los peces y el aumento de la flora invasora. Es una situación de degradación recurrente, ante la cual la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) es la autoridad competente y continúa sin hacer nada, permitiendo que el río Albaida llegue a su actual grave situación”.
Según Ferrer, “en las Corts Valencianes aprobamos hace más un año, y por unanimidad de todos los grupos, instar a la CHJ a hacer un plan de recuperación y de uso sostenible del río Albaida, junto con la Consellería de Agricultura y Medio Ambiente, los ayuntamientos afectados, los regantes y los colectivos ciudadanos. Un plan de gestión de los usos del agua y de restauración fluvial de la cuenca baja de este río para evitar la proliferación de plantas invasoras y la desecación del río, y que contemple medidas de urgencia para minimizar los impactos negativos, eliminando la flora invasora y rescatando la fauna autóctona, cuando se produzcan situaciones excepcionales de deterioro”.
“Las medidas contenidas tanto en el Plan de Cuenca del Júcar vigente como en los anteriores son insuficientes e ineficaces para evitar la proliferación de plantas invasoras y la desecación del río Albaida. Son insuficientes porque sólo se aborda la eliminación de plantas invasoras de una manera muy limitada y no la prevención de su aparición y proliferación. Y, además, no se establecen medidas efectivas de gestión para evitar la desecación del río en el tramo aguas abajo de la Acequia Común de l’Ènova. Estos problemas son recurrentes y se repiten año tras año, afectando en particular al término municipal de Manuel, tal y como hemos visto”.
“La CHJ tiene que ponerse las pilas y garantizar la calidad de vida y un entorno saludable a las personas que viven cerca del río Albaida. Mientras no lo haga, continuaremos viendo este paisaje desolador, con un río que se seca en pleno siglo XXI. La salud de este entorno natural pasa por prevenir y no por poner la tirita cuando el mal ya está hecho”, ha concluido la diputada Graciela Ferrer.