El grupo parlamentario Compromís ha registrado en Les Corts una proposición no de ley con la que manifiesta la oposición a la barrera electoral que se incluye en la reforma electoral aprobada recientemente por el Parlamento Europeo y que obligará a los partidos a obtener entre un 2% y un 5% de los votos para conseguir representación en la Eurocámara a partir de las elecciones del año 2024.
Según explica la portavoz adjunta de Compromís, Mònica Àlvaro “con esta iniciativa queremos que se traslade el posicionamiento contrario a esta reforma a aquellas instituciones europeas donde tenga voz la Generalitat, como el Comité de las Regiones. Asimismo el objetivo es transmitir el posicionamiento de Les Corts en el Congreso y al Senado para instarles a que a la hora de introducir la barrera electoral para las elecciones al Parlamento Europeo ésta sea del 2%, es decir, el mínimo porcentaje permitido, a fin de respetar la pluralidad política y la diversidad existente en el Estado”.
“El Parlamento Europeo -ha profundizado Álvaro- ha aprobado en esta reforma electoral una serie de medidas dirigidas a impulsar el voto anticipado, por correo o electrónico i dar más visibilidad a los partidos políticos europeos en las papeletas de voto, entre otras. Sin embargo, esta reforma olvida otros aspectos como las listas cremallera o el voto a partir de los 16 años de edad, o incluye otras medidas obligatorias como la imposición de un umbral mínimo de voto entre el 2% y el 5% en aquellos estados en los que haya circunscripción única con más de 35 escaños, a partir de las elecciones del 2024”.
Actualmente, sólo España y Alemania se encuentran en esta situación, estados que próximamente deberán modificar sus leyes electorales para adaptarse a la reforma europea. “Pero habría que preguntarse cuáles son los motivos que han conducido a hacer esta modificación y cómo afectaría al contexto del Estado Español”.
Para la parlamentaria de Compromís “sobre los motivos, es bien sabido que esta reforma viene impulsada por los partidos mayoritarios alemanes con el fin de restringir el acceso de formaciones antieuropeístas. Una modificación que ya intentaron introducir modificando su ley electoral pero que el Tribunal Constitucional alemán rechazó. Por otra parte, hay que tener en cuenta que según varios sondeos publicados, estas formaciones ya superan el umbral propuesto, por lo que la introducción de la barrera electoral no tendría los efectos esperados”.
En cambio, en el contexto español esto sí tendría consecuencias graves. Cabe recordar que en las últimas elecciones al Parlamento Europeo de 2014 de las 10 candidaturas que consiguieron obtener representación hubo un total de 4 candidaturas que lo hicieron con menos de un 5% de los votos. En concreto fueron l’Esquerra pel Dret a Decidir con 630.000 votos (4%), Ciudadanos con 497.000 (3’2%), Los Pueblos Deciden con 326.000 (2%) y Primavera Europea con 302.000 (2%).
Con la reforma aprobada por el Parlamento Europeo habría, por tanto, cerca de dos millones de votos que se verían amenazados de quedar fuera de las instituciones. Es decir, casi dos millones de personas que dejarían de tener su voz representada al órgano que, supuestamente, representa directamente a los ciudadanos de la Unión Europea.
“Estamos pues, ante una propuesta antidemocrática que atenta contra los derechos de las minorías y contra la pluralidad y la diversidad que se supone que la Unión Europa debería defender. Es por ello que a la hora de que las Cortes Generales hayan de introducir esta barrera electoral en el apartado relativo a la elección de los diputados y diputadas en el Parlamento Europeo de la LOREG, reclamamos que se acojan a introducir el mínimo porcentaje permitido, es decir, el 2% de los sufragios”, ha concluido Álvaro.