Según ha explicado la diputada del grupo parlamentario Compromís, Mònica Àlvaro “el pasado 17 de octubre la Consellería de Innovación, Industria, Turismo y Comercio hizo pública la firma de un convenio de colaboración con la Asociación de Promotores de Festivales de Música (Profest) por valor de un millón de euros. Hay que matizar que este convenio no es nuevo, ya que el anterior gobierno del Botánico, mediante las marcas creadas, como por ejemplo la de Mediterranew Fest, ya firmaba convenios con esta asociación. No obstante el importe del convenio ha aumentado de los 250.000 mil euros (del convenio de junio del 2022 y 2021) al millón de euros del actual convenio”.
Según la propia Consellería, mediante esta colaboración se podrán implementar mejoras en la seguridad y el acceso de los festivales que Profest promueve en el territorio valenciano. Desde Compromís se destaca que “no se han explicado suficientemente los motivos del aumento exponencial del importe del convenio. Esperamos que un apoyo pareciendo se extienda a otros festivales de música, como aquellos que programen música en valenciano, que no entran en este convenio”. Es por eso que el grupo parlamentario Compromís ha pedido el convenio firmado con Profest. Aun así, la diputada Mònica Àlvaro ha manifestado que “estamos ante una excelente oportunidad de exigir ya no solo incrementar la seguridad a los festivales, sino también acabar con carencias que han sido denunciadas por asociaciones de consumidores como FACUA y por usuarios de estos eventos”.
“Es por eso por lo que hemos presentado una proposición no de ley a la Comisión de Industria y Turismo de Les Corts, instando al gobierno valenciano a añadir una adenda a dicho convenio mediante la cual se prohíban prácticas abusivas en los Festivales que reciban esta subvención” ha manifestado Àlvaro. Entre estas prácticas Compromís destaca las cuotas de gestión que los festivales cobran a usuarios por el retorno del dinero no empleado y acumulado en las pulseras cashless, la negativa a introducir comida en el recinto a pesar de sufrir enfermedades e intolerancias alimentarías de las personas que acuden a los festivales o incluso cobrar mediante una pulsera “reaccess” la entrada y salida libre del recinto del Festival, pese a haber adquirido la entrada o abono.
“Se trata de denuncias que en su mayoría ya ha recibido el Consell, pero de las cuales no se ha hecho eco y hará falta que estas se incluyan en una adenda, puesto que el gobierno valenciano no puede permitir que estas prácticas denunciadas reiteradamente se desarrollen con dinero público”, ha concluido Àlvaro.