El grupo parlamentario Compromís ha presentado una proposición no de ley en Les Corts con el objetivo de conseguir erradicar el desecho sistemático de alimentos en buen estado por parte de las superficies comerciales.
Según ha señalado la diputada de Compromís, Isaura Navarro, “con nuestra iniciativa parlamentaria queremos instar al Consell a aprobar una normativa que prohíba el desecho sistemático de alimentos en buen estado por parte del comercio de alimentos, prestando especial atención a las grandes superficies y cadenas comerciales”.
Asimismo Compromís insta a establecer los mecanismos necesarios para que los alimentos, aunque aptos para el consumo, sobrantes de los mercados, supermercados e hipermercados, sean distribuidos a través de convenios con los ayuntamientos o entidades públicas o privadas sin ánimo de lucro.
Navarro ha recordado que “según estadísticas publicadas por la Unión Europea, España es el territorio europeo donde más ha aumentado la pobreza, representando el 10,7% del total de la UE. Un informe de Caritas del año 2014 identificó a España como el segundo país de la UE con más pobreza infantil, sólo por detrás de Rumanía. Pocas semanas después otro informe, en este caso, de “Save the children” destacó que España es el segundo país donde las ayudas sociales son menos efectivas en la reducción de la pobreza infantil, sólo por detrás de Grecia”.
Las causas de la pobreza son múltiples y complejas, y para abordarla adecuadamente es necesario reorientar las políticas públicas, tradicionalmente segmentadas desde un punto de vista temático y sectorial, hacia un enfoque mucho más transversal que puede afectar a diferentes ámbitos de actuación como los servicios sociales, el empleo, la enseñanza, la vivienda, la salud o la justicia y que pone a la persona en el centro de atención.
“Una de las paradojas con las que nos encontramos, es ver como muchas de las superficies comerciales dedicadas a la alimentación, lanzan a los contenedores toneladas de alimentos todavía aptos para el consumo, mientras cientos de miles de familias tienen dificultades para llegar a fin de mes. La brutalidad de los datos obliga a las administraciones públicas a hacer frente a esta situación con todos los elementos que se tengan en las manos. Muchos ayuntamientos ya han establecido redes de distribución de alimentos a personas necesitadas, pero tenemos que conseguir que lo hagan todos”, ha concluido Navarro.