El senador territorial de Compromís, Carles Mulet, señaló hoy que con la parálisis del Ejecutivo central ha producido que desde octubre pasado, no se ha dado respuesta oficial a las medidas específicas que el Gobierno Central, piensa o ha tomado respecto a la llamada plaga del olivar, la Xylella fastidiosa que, desde hace meses, está afectando a buena parte de los olivares del sur de Italia y está amenazando en expandirse al resto de países mediterráneos.
Mulet ha recordado que en el debate de los Presupuestos Generales del Estado para 2016 se reclamó por parte de Compromís en la Comisión de Agricultura un plan de acción. Posteriormente se presentaron una serie de preguntas escritas y orales, así como diversas iniciativas en la Cámara Alta, que no han obtenido ninguna respuesta por parte del Ejecutivo en funciones, mientras crece la desesperación por esta propagación que no se ha detenido en la península italiana.
“Ahora la película de Icíar Bollaín, el Olivo, rodada en nuestras comarcas, ha vuelto a poner de actualidad el valor incalculable de los olivos milenarios o centenarios. Pero desespera ver la inacción del ejecutivo en el control de plagas como el greening, que amenaza a los cítricos, en un territorio en el que ya hemos sufrido devastaciones como la del picudo rojo de las palmeras o la plaga del minador de los pinos y que ha afectado a nuestro paisaje y seguridad en algunos casos“, ha señalado.
En octubre Compromís ya alertó que le correspondía al Gobierno Central una mayor implicación en el control de plagas provenientes de terceros países e incrementar la seguridad con medidas como acotar puertos de entrada a las importaciones de vegetales, ornamentales, frutas y hortalizas de terceros países con controles mucho más laxos o de zonas en las que se han detectado plagas o la presencia de bacterias o sus vectores.
Mulet ha recordado que se trata de una bacteria que afecta a cultivos leñosos, lo que puede afectar también a cítricos, almendros, vid, parajes naturales e incluso en el bosque de olivos milenarios que existen muy especialmente en el norte de Castelló y sur de Tarragona.
Según Mulet, la agricultura valenciana se encuentra en una situación muy vulnerable ya que “a pesar de que en Valencia se realizan buenas prácticas como las inspecciones en origen o la existencia de un Plan Fitosanitario en funcionamiento desde 2004 que controla plagas o la existencia de vectores en cítricos, vemos como no hay reciprocidad con los países terceros, que siguen sin disponer de normativas en este sentido o bien las incumplen, y como las fronteras y puertos de Europa es un colador de plagas, lo que amenaza la economía valenciana“, ha asegurado.
Para el representante valenciano, “la situación es también grave para nuestra citricultura ante plagas como el greening (HLB), el vector del que ya se ha detectado en Canarias, Galicia y Portugal, ya que si llegan aquí puede poner en jaque a toda la citricultura valenciana“, ha alertado. Otras plagas como la cancrosis de los cítricos, en la que nuestra agricultura podría verse expuesta por las compras que se realizan de cítricos de Sudáfrica en los momentos donde aquí no hay producción, suponen otro riesgo potencial ya que se han detectado envíos afectados en frontera y al hecho de que EEUU ha arrancado ya el 90% de su citricultura por esta enfermedad bacteriana.
“El sector agrario entiende que no existen suficientes controles. De ahí que insistiremos tanto en el Parlamento Europeo como desde nuestras instituciones más cercanas -Congreso, Senado y Cortes Valencianes- para que se fuerce a la UE al establecimiento de inspecciones en origen y a medidas de control adicionales en aeropuertos con la entrada de vegetales, la exigencia de más formación a la ya existente y controles sanitarios“, concluyó.