La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha afirmado que sin un modelo social fuerte, un empleo que garantice los derechos sociales y que sea digno, la desigualdad entre hombres y mujeres “será una constante en Europa y se agravará en los países más castigados por la crisis, como España”. Además, para implementar medidas concretas en este campo “se requerirá un respaldo económico por parte de la UE a los Estados”, ha agregado.
Oltra se ha pronunciado de esta manera durante su intervención en el Consejo Europeo de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión (EPSSCO) donde ha fijado la posición común de las comunidades autónomas y el Estado español en relación al documento del Consejo Europeo para tratar de acabar con las desigualdades entre hombres y mujeres. La exposición de la vicepresidenta ha sido en valenciano y se ha basado en un texto liderado por la Comunitat Valenciana y consensuado con el resto de territorios españoles.
La introducción de la posición común que la consellera ha defendido ante el Consejo advierte de que la crisis económica “no solo se ha centrado en un incremento del desempleo y mayor inseguridad social”, sino que ha conllevado un aumento de la pobreza. Los efectos de exclusión y desigualdad “se han acusado más en las mujeres, la juventud y los parados de larga duración”.
Por ello, el mencionado texto pretende ser una “guía para acabar con la desigualdad entre hombres y mujeres en el terreno laboral”, que requerirá de acciones concretas con apoyo presupuestario definido, ha señalado.
Oltra, en nombre de las comunidades autónomas y del Estado español, ha apuntado algunas medidas que la UE debería tener en cuenta para “enriquecer el texto del Consejo de la UE en materia de igualdad, educación en igualdad de género, precariedad laboral y lucha contra el desempleo.
Por lo que se refiere a la lucha contra el desempleo, Oltra ha lamentado que, a pesar de que tanto las instituciones europeas como los Estados Miembro “insisten en que el emprendimiento es la mejor salida a una situación de desempleo, no existe apoyo financiero ni otra serie de medidas que faciliten dicho camino”. Por ello, ha llamado a la “acción de impulso de los jóvenes para que adquieran competencias y se facilite su inserción el mercado laboral”.
Para los parados de larga duración, ha considerado que es “contradictorio no ofrecer ninguna medida concreta para facilitar su reingreso en el mercado laboral” cuando, además, “padecen discriminación por edad”.
En el campo de la igualdad, la consellera ha reclamado que sea reconocido como un principio que forma parte de la tradición constitucionalista de la mayoría de los Estados. En el apartado de la educación en igualdad de género, ha remarcado la necesidad de la promoción de la igualdad de género en los centros educativos con el “impulso de valores que fomenten la equidad, la igualdad y la no discriminación” a través de los contenidos de la enseñanza.
Por otro lado, la vicepresidenta ha recordado que el Comité Europeo de Derechos Sociales ha dictaminado que los recortes económicos “no deben conllevar una merma de los derechos sociales”. Por ello, ha propuesto que las medidas para luchar contra la precariedad laboral se utilicen “no sólo en la Carta Social Europea sino también en la jurisprudencia del Comité Europeo de Derechos Sociales”.