La portavoz adjunta y portavoz del grupo de Compromís en la Comisión de Asuntos Europeos en las Corts, Mònica Álvaro, ha pedido la dimisión inmediata de Pedro Agramunt del Consejo de Europa “para dejar ya de una vez de manchar el nombre de los valencianos y las valencianas en Europa”, toda vez que hoy el ex Secretario General del PPCV y actual senador se enfrenta a la Comisión de Reglamento del Consejo de Europa que decidirá si lo sanciona por corrupto.
Agramunt está acusado de haber recibido sobornos por parte del régimen dictatorial de Azerbaiyán para blanquear los abusos contra los Derechos Humanos que se cometen en aquel país del Cáucaso. En concreto, habría recibido pagos en forma del reconocido, exclusivo y, sobre todo, caro caviar beluga que es típico de la zona, así como los servicios de prostitutas, acusaciones ante las cuales afirmó que “ojalá fueran verdad y tuviera las fotos para presumir con los amigos”.
Ahora, ante las fuertes acusaciones a que se enfrenta, Agramunt, según Mònica Álvaro, “ha optado por la ‘conspiranoia’, afirmando que las organizaciones que lo han denunciado, European Stability Initiative (ESI) y Freedom Filas, que actúan bajo el paraguas de la Open Society, tendrían vínculos con el proceso independentista catalán. Agramunt cita como prueba que dos activistas de Freedom Filas, Yuri Dzhibladze y Olga Zakharova, habrían sido señalados como miembros de una ‘trama rusa proindependentista’ por parte de cierta prensa de Madrid, a pesar de que ahora, según la defensa de Agramunt, al estar vinculados a la fundación Open Society, se habrían cambiado de bando y serían miembros de la oposición anti Putin”.
Así, “el asunto de Agramunt es delirante desde el principio al fin que esperamos que, por el buen nombre de los valencianos y valencianas en Europa, llegue muy pronto. En todos los casos de corrupción del PP aparece su nombre, desde aquel caso Naseiro, y este hombre ha sido todo en el PP valenciano. Podemos suponer que vale muchísimo más por lo que calla que por lo que dice, porque, además de decir muchas barbaridades, ha tenido y tiene la tolerancia y la aquiescencia de la dirección del PP cuando no directamente el apoyo explícito”, ha concluido la diputada Mònica Álvaro.