El senador de Compromís, Jordi Navarrete, ha pedido un “esfuerzo inversor real mucho mayor” de los presupuestos para ciencia por parte de la Administración General del Estado, tras constatarse el paulatino descenso del porcentaje para ciencia hasta llegar, según la Fundación para la Innovación (COTEC) al 29,7% de lo presupuestado el año pasado.
La coalición recuerda todo el terreno y tiempo perdido “que España debe dedicar para acercarnos al conjunto de Europa en esta materia” y ha señalado que “nos comprometimos con la Unión Europea a dedicar el 3% del PIB a I+D en el horizonte 2020 como motor del desarrollo económico y social”.
Para el representante valencianista “urge garantizar que la cantidad presupuestada en inversión pública en I+D+I en los ministerios competentes se ejecuta en sus máximos grados de cumplimiento, para reducir la brecha existente con Europa y acercarnos a la media de los países de nuestro entorno, que tienen la firme voluntad de cumplir con los objetivos marcados por la Unión Europea”. Para Navarrete “esa sería la mejor marca España posible”, por la que la coalición insta al Gobierno a compensar los mínimos históricos alcanzados en los últimos años aumentando la tasa de ejecución de políticas públicas de I+D+I hasta porcentajes que garanticen llegar al 3% del PIB a I+D en el horizonte 2020.
La coalición reclamará adoptar cuanto antes medidas presupuestarias y legislativas para frenar el distanciamiento con Europa en esta materia, tales como reforzar la educación primaria, promover que las universidades sean innovadoras, desarrollar una economía que valore y financie activos intangibles, además de reforzar el papel tractor del sector público e incentivar el talento intraemprendedor, en la línea de lo manifestado por la COTEC.
El Estado español ha visto encadenar descensos en la intensidad inversora en I+D durante años, hasta situarse a la cola de Europa en cuanto al gasto en relación al PIB. Este gasto ha crecido por debajo de lo que crecía la economía, perpetuando un modelo productivo de elevado riesgo. En este sentido Compromís considera urgente que se adopten cuanto antes medidas presupuestarias y legislativas para frenar el distanciamiento con Europa.
“La evolución de la inversión, aquello que debería hacernos presumir de nuestro país, nos sonroja cuando vemos gráficos como los del peso de la I+D en la estructura económica del país en un contexto de supuesta recuperación económica tras la crisis y con una evolución por debajo del PIB”, ha dicho el senador castellonense.
Especialmente mal queda en el balance la inversión en el sector público, que lastra la inversión en lugar de favorecerla, lo que nos ha dejado a la cola de Europa. Las cifras son muy preocupantes: desde 2009 España ha perdido 13 de los 21 puntos de convergencia en I+D que había recortado a Europa entre 2000 y 2008. Nos situamos en 2016 en el 58,6% de inversión que realiza el promedio de países de la Unión Europea, lo que nos devuelve a la situación que España tenía en el año 2003. España sigue sin recuperar niveles de inversión en I+D previos a la crisis (está un 9,1% por debajo). Por el contrario, la UE los ha superado de forma clara (está un 27% por encima).
La propia COTEC responsabiliza de esta dinámica a la decreciente tasa de ejecución del presupuesto dedicado a esta política. Según sus datos “la Administración Central solo invirtió el año pasado uno de cada tres euros del presupuesto para I+D+I consignado en los ministerios competentes”. De los 4.635 millones de euros de presupuesto público para I+D+I disponibles en 2017, finalmente se invirtieron 1.376, un 29,7%, la tasa de ejecución más baja en I+D+I desde que se registra este dato.