Ante los inicios de tramitación por parte del Ministerio de Fomento de las actas previas de expropiación de los terrenos de València y Alboraia afectados por el proyecto del PP de ampliación de la V21, desde Compromís se lamenta que el nuevo Ministro de Fomento , José Luis Ábalos, no haya atendido las demandas de los ayuntamientos, asociaciones de defensa de la Huerta y personas afectadas de suspender la tramitación de las expropiaciones, y no haya convocado una reunión de trabajo para analizar las alternativas al actual proyecto y encontrar una solución consensuada y más respetuosa con la huerta.
“Es urgente que el nuevo Gobierno cumpla con su su palabra y no demore ni un día más convocar una reunión para darle a conocer una propuesta alternativa al proyecto actual de ampliación de la V-21, que sea capaz de mejorar el acceso norte a la ciudad de València y no arrase los más de 80.000 metros cuadrados de huerta afectados por el actual proyecto del PP “ha manifestado el portavoz de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví.
“Estamos convencidos de que las inversiones en infraestructuras sólo son útiles si sirven para mejorar la calidad de vida de las personas y están bien dimensionadas y diseñadas para minimizar los impactos y afecciones negativas sobre el territorio y el medio ambiente. Cuanto más tiempo deje pasar el Ministro y vayan avanzando los trámites, más complejo y costoso será poder corregir este proyecto inútil e innecesario “.
Por su parte, la diputada de Compromís en las Corts, Graciela Ferrer, ha recordado que el anterior gobierno central del PP justificó la ampliación en un carril de entrada y uno de salida de la V21 entre Port Saplaya y València en el crecimiento del tráfico de vehículos privados y las retenciones de acceso la ciudad. Unos motivos que Ferrer ha calificado como “muy discutibles” ya que las retenciones existentes son muy puntuales, produciéndose sólo en sentido de entrada – no de salida – con tráfico lento a primera hora de las mañanas en días laborables y última hora de la tarde los domingos de verano. Además, no se analizan las razones reales que han generado esta situación, como los 20 años de inexistente política de transporte público metropolitano de los gobiernos del PP que ha lastrado la movilidad metropolitana.
“El crecimiento de la intensidad de tráfico de entrada a la ciudad por el norte está relacionado con los desplazamientos privados inducidos, por una parte, por el aumento de población en los municipios litorales del norte de València, sobre todo en verano; y por otra parte, por las obras del tercer hilo del AVE València-Castelló que ha generado unos fuertes recortes de los servicios de trenes de cercanías entre ambas ciudades, tanto en cantidad (reducción de frecuencia) como en calidad ( impuntualidad, prolongación del tiempo de viaje, trayectos en bus) que está afectando desde hace tiempo a miles de ciudadanos y ciudadanas “.
“Como en el resto de Europa, el futuro de la movilidad metropolitana de València pasa por la articulación de un sistema de transporte público metropolitano de calidad, que permita la combinación de modalidades de transporte privado (motorizado y no motorizado) con el transporte público para acceder con comodidad, eficacia y facilidad en las zonas urbanas. Una apuesta por la gestión sostenible de la movilidad y la calidad de vida de las personas que la falta de financiación estatal del transporte metropolitano valenciano continúa perjudicando. Por tanto, el proyecto de ampliación de la V21, aprobado y adjudicado por el PP y que el nuevo gobierno socialista ha adoptado acordando el procedimiento de urgencia para las expropiaciones, es un proyecto ineficaz y obsoleto que sólo servirá para incrementar el tráfico de entrada en València por la avenida de Catalunya y la rotonda del Mirador, donde actualmente ya se producen retenciones en hora punta, y es completamente innecesario en sentido de salida de la ciudad hacia el norte “.
En este sentido, Ferrer ha recordado que desde Compromís ha presentado una alternativa mucho menos onerosa para las arcas públicas, que prácticamente anula la destrucción de la huerta del proyecto actual, y que se basa en dos cuestiones. Por un lado, conectar los dos carriles de entrada construidos desde hace años y sin uso de la avenida Ingeniero Fausto Elio con la V21 por un vial bajo la misma autovía, y por otra, ampliar en un carril de entrada la V21 entre Port Saplaya y ese punto de conexión de entrada utilizando el espacio disponible de la mediana, dentro de la misma plataforma de la V21.
“De esta manera, se propicia, además, la desconcentración del tráfico de entrada norte de la ciudad, distribuyendo el flujo de tráfico hacia la avenida Tarongers por la rotonda de Serrería, y se evita la destrucción de huerta al descartar la ampliación de la V21 en sentido de salida por innecesaria, ya que cuenta con cuatro carriles de salida: dos desde Avenida Catalunya y dos desde la Avenida Ingeniero Fausto Elio. Un planteamiento viable, mucho más económico, y respetuoso con la huerta y las personas que viven y la trabajan “concluyó Ferrer.