La portavoz de Compromís en la Comisión de Políticas de Igualdad de Género y LGTBI en las Corts, Mònica Álvaro, ha presentado una propuesta para plantear una modificación urgente, mediante la próxima ley de acompañamiento estatal, de la ‘Ley 1/2004 de 28 de diciembre, de medidas de protección integral contra la violencia de género’, que incorpore el reconocimiento de todos los tipos de violencia de género y machista que existen. Además, también pide que se reconozca como agresores y víctimas los casos donde la víctima no tenía una relación afectiva con su agresor, en el marco del Convenio de Estambul.
Según la también portavoz adjunta del grupo parlamentario de Compromís, “la legislación valenciana adopta un concepto más amplio que la española, puesto que la Ley Integral contra la Violencia sobre la Mujer en el ámbito de la Comunidad Valenciana sí reconoce como víctimas a todas las mujeres sin necesidad de haber tenido una relación sentimental con su agresor o asesino, así como a los hijos y las hijas menores y/o personas sujetas a tutela o acogida de estas que sufran cualquier perjuicio a consecuencia de la agresión”.
“Hay que insistir que el Pacto de Estado contra la Violencia de Género establece que se tienen que reconocer como formas de violencia contra las mujeres las establecidas en el Convenio de Estambul, incluso en los casos en que no exista con el agresor una relación afectiva. Sin embargo, ante el bloqueo político del Estado español de los últimos años, esto no se ha desarrollado. Ahora, ante la Emergencia Feminista en la que se encuentra nuestra sociedad, hay que considerar la necesidad de aplicar algunas de las medidas del Pacto, y hacerlo de manera urgente”.
El Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica, más conocido como Convenio de Estambul, fue aprobado en 2011 y ratificado por el Estado español en 2014. “Este Convenio es el primero legalmente vinculante que se aprueba sobre la violencia de género. Y con su ratificación por primera vez, el Estado español, como el resto, se compromete a detectar, prevenir y eliminar la violencia contra mujeres y niñas en todas sus manifestaciones”.
“Hablamos de que es un documento que supone un gran avance puesto que, además de ser jurídicamente vinculante, reconoce por primera vez la violencia contra las mujeres más allá del marco de las relaciones sentimentales, más allá de la violencia que se ejerce entre las parejas o exparejas, pasando a describir esta violencia como un problema social”.
“Es importante destacar que desde la llegada del Botánico al gobierno autonómico se han realizado una serie de modificaciones para ampliar cuáles son las diferentes manifestaciones de la violencia sobre la mujer, para incluir todos los tipos de violencias, y también el concepto de agresor o quienes son las personas que tienen derecho a recibir indemnizaciones a consecuencia de la violencia de género y machista”, ha concluido la diputada Mònica Álvaro.