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La coalición Compromís ha censurado la “irresponsabilidad” del PP “que pocas lecciones puede dar de cumplimiento de la ley a nadie y que ha decidido activar el 155 con Cataluña y amenaza como un matón con aplicarlo en otras autonomías”, algo sin parangón en la historia democrática. El senador territorial ha declarado esta mañana “lo bien que le va al PP esta crisis territorial para esconder detrás de las banderas, la confrontación y los sentimientos más viscerales, todas sus miserias, sus problemas con la justicia, con su financiación y, en definitiva, con la corrupción”.

Mulet ha agregado que “el PP no tiene voluntad de solucionar nada, sino en prolongarlo el máximo tiempo posible como cortina de humo perfecta”. Así ha señalado que “mientras hablamos de Cataluña no hablamos de la Gürtel” y ha recordado que “ante un referéndum que dicen no ha existido, la respuesta tendría que haber sido no reconocer los resultados por no tener carácter vinculante y si creen que la mayoría de Cataluña no está por la escisión, pactar un referéndum vinculante y empezar la campaña electoral, como forma pacífica y democrática de solucionar este enquistado problema

Compromís considera que algunas de las medidas planteadas por el Consejo de Ministros van a ser “contraproducentes”, por “desafortunadas y miopes” pues “parecen no haberse dado cuenta que no van a contribuir en nada en la solución del conflicto, como tampoco ayudó su campaña de recogida de firmas contra l’Estatut”, ha señalado Mulet.

Así Compromís apuesta por una vía del diálogo “pero no solo para Catalunya, sino con todo el estado, con todas las nacionalidades, para diseñar un futuro en el que estemos todos a gusto, por el convencimiento, por estar a gusto y no por la fuerza. Esa es la aportación que hacemos los valencianos de Compromís, apostando por el diálogo”.

DISOLUCIÓN DEL PP

El senador valenciano ha reclamado la “disolución” del PP, inmerso en graves problemas de financiación, acusaciones de delitos electorales y otras muchas formas de presuntos delitos. “Abanderan la crispación para agitar a la ultraderecha que actúa con impunidad en Zaragoza o València; polarizar la sociedad y recaudar votos con ello, en vez de entonar su mea culpa y disolverse”, ha concluido.