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La diputada de Compromís en Les Corts, Graciela Ferrer, ha incidido hoy en una de las situaciones que se están produciendo durante el estado de alarma decretado para hacer frente a la crisis sanitaria provocada por la COVID19, “las personas que se autoabastecen de productos agrarios a través de huertos sociales o urbanos así como de pequeñas parcelas fuera de su domicilio habitual han encontrado, en muchos casos, dificultades e incluso impedimentos para poder acceder a las parcelas para cosechar productos o realizar las tareas necesarias para el cultivo”.

Según explica Ferrer “a pesar de que el decreto del estado de alarma establece que están permitidos los desplazamientos para la adquisición de alimentos, las autoridades competentes en materia de seguridad y orden público dificultan, obstaculizan o, directamente, impiden el acceso de las personas a sus parcelas para autoabastecerse de alimentos, interpretando que la producción de alimentos para autoconsumo son actividades accesorias, recreativas o de ocio”.

Cabe recordar que la producción de alimentos para consumo propio es una actividad esencial, que da autosuficiencia nutricional a las unidades familiares, promueve la autonomía y calidad de la alimentación, y por tanto, de la salud, y reduce el gasto de las familias en materia de alimentación. En muchos pueblos y ciudades del País Valenciano, tanto en zonas rurales como periurbanas, existen muchas iniciativas sociales de escala local, en muchos casos promovidas por las autoridades locales, de producción para el autoconsumo y la autosuficiencia.

Mientras en Cataluña o Galicia las correspondientes delegaciones de gobierno han aplicado una interpretación de las restricciones de movilidad que permiten el acceso a huertos de autoconsumo bajo determinadas condiciones, esto no se ha hecho en el caso valenciano.

“Desde Compromís, en línea con las reivindicaciones de 600 entidades, asociaciones y organizaciones en defensa de la soberanía alimentaria #SOSCampesinado, reclamamos que el gobierno central elabore una instrucción clara e inequívoca dirigida a todas las autoridades públicas para que se reconozca e incluya la producción y cosecha de alimentos para autoconsumo en huertos sociales, urbanos y en suelo agrario como una de las actividades esenciales de adquisición de alimentos”, ha señalado la parlamentaria.

Así han de permitirse los desplazamientos de las personas para realizar trabajos agrarios (trabajos de mantenimiento y cuidado de los cultivos o animales, o cosecha de los productos) en las parcelas de autoconsumo que tengan asignadas o de las que hagan uso.

Para Compromís se de debe garantizar el funcionamiento de los grupos y cooperativas de consumo así como el acceso de las personas que forman parte para poder adquirir los alimentos, así como el funcionamiento de las paradas de alimentos en los mercados no sedentarios, estableciendo asimismo las condiciones para garantizar el distanciamiento social, la higiene y la evitación de contagios de la COVID19.

Según Ferrer “la paralización de la actividad de estos grupos y cooperativas supone en muchos casos la asfixia de pequeñas producciones, que dependen en la práctica totalidad de estas plataformas y de otros canales de distribución directa que se encuentran en la misma situación, por eso reclamamos este cambio de la situación en que se encuentran”.