La Comisión de Sanidad y Servicios Sociales del Congreso ha aprobado la Proposición no de Ley de Compromís en la cual se insta al Gobierno a que en el etiquetado de los productos se especifique la cantidad de azúcar añadido. La propuesta de los valencianistas han contado con los votos favorables de Unidos Podemos, ERC y del PSOE y la abstención del PP y Ciudadanos.
La diputada proponente, Marta Sorlí, ha aceptado la enmienda de Unidos Podemos que incorpora a la proposición la “prohibición de indicar en el etiquetado que un producto es saludable si tiene una altas tasa de azúcares añadidos”.
Sorlí ha defendido que “hay que especificar los azucares añadidos porqué existe un debate muy polarizado entre la industria, que busca minimizar los efectos perjudiciales del azúcar y habla de la importancia del balance energético y los expertos que consideran el azúcar casi como una sustancia adictiva que ha provocado serios problemas de obesidad y diabetes en una gran parte de la población”.
La portavoz de Compromís en la comisión ha recalcado que “la obesidad es la gran epidemia de nuestra época” y que “el número de personas con diabetes ha aumentado en 314 millones en los últimos 30 años, pasando de 108 millones en 1980 a 422 millones en 2014”.
Además, Sorlí ha alertado que la OMS prevé que la diabetes se convierta en el año 2030 en la séptima causa mundial de muerte y que calcula que las muertes por diabetes se incrementarán en más de un 50% en los próximos 10 años”.